Una de las áreas en las que las redes sociales han tenido un mayor efecto son las relaciones de género, sobre todo en sociedades altamente conservadoras, donde han permitido que las mujeres y los hombres jóvenes puedan establecer un contacto sostenido y directo. En algunos casos el uso de cuentas falsas es un elemento crucial.
En nuestro sitio de studio en Turquía descubrimos que las redes sociales permiten que la gente pueda participar en actividades que de otro modo habrían sido mal vistas por su familia y su comunidad. En este vídeo, una joven explica por qué tiene que utilizar cuentas anónimas para poder conseguir un público para su música sin caer en la deshonra como mujer.
El uso de cuentas falsas puede ser aún más relevante para las personas que expresan identidades que van más allá de las relaciones heterosexuales normativas.
Historia
Los límites de la divulgación
En este vídeo, hecho por un estudiante de la universidad local, una chica habla sobre su uso de un perfil falso después de la reacción negativa que recibió al declararse homosexual.
En esta ciudad industrial, donde las mujeres son los trabajadores preferidos, las cuentas en redes sociales de los hombres muestran más sensibilidad y suavidad de lo que muestran fuera de línea, una importante diferencia con respecto a los estereotipos de género tradicionales.
Historia
Por qué los hombres se presentan como niños malcriados
Aunque las redes sociales han tenido un impacto menos dramático sobre el género en nuestro sitio de estudio italiano y casi no hay cuentas anónimas, las redes sociales han permitido una mayor intimidad en las parejas. Como se muestra en esta historia, algunas parejas incluso comparten un único perfil.
Historia
Vida de pareja
Aquí, la verdadera prueba de una amistad es ser capaz de saber quien es una persona sólo a partir de su pseudónimo en línea.
La gente utiliza las redes sociales de manera que las cuentas múltiples, cada una dirigida a un público diferente, son tan importantes como las cuentas falsas.
Aunque los usuarios jóvenes del pueblo son muy conscientes de que hay cuentas falsas, crear cuentas falsas no es una práctica popular. Pero tienen segundas y terceras cuentas para flirtear.